
Pasó de todo en el Gran Premio de México de la Fórmula 1: una largada con autos fuera de pista, lucha por varias posiciones, cambio de estrategias a la hora de pensar en los neumáticos, arremetidas fenomenales y un cierre con auto de seguridad virtual para que Evander Holyfield baje la bandera a cuadros. Y entonces llegó el festejo de Lando Norris, quien ganó de punta con su McLaren y es el nuevo líder del campeonato, un punto arriba de su compañero Oscar Piastri, quien finalizó quinto. Arde la definición en la Máxima, con cuatro carreras por disputarse.
«Es maravilloso e increíble haber ganado en México por primera vez. Debo ir un fin de semana a la vez. Estoy feliz y enfocado en mí mismo. Mantengo la cabeza gacha y pienso en mí», aseguró Norris, quien ganó su décima carrera.
Charles Leclerc (Ferrari) y Max Verstappen (Red Bull) completaron el podio y Oliver Bearman, el piloto de 20 años de Haas, llegó cuarto, en el mejor resultado de su carrera. Lo mejor está por venir en la definición de la Fórmula 1.
El tramo inicial de la competencia fue un espectáculo de maniobras, con autos rodando finito a la par y al menos un cuarto de los pilotos manejando más por el pasto que por el asfalto. Una locura de comienzo. Apenas se apagaron las luces del semáforo, Norris largó bien, pero Leclerc y Lewis Hamilton se le pusieron al ladito, rozándose los neumáticos. Y para completarla, Verstappen se fue por la izquierda con las ruedas de ese lado pisando el piano. Iba a pasar algo en la primera curva y pasó: Verstappen, afuera.
George Russell enseguida se quejó que el neerlandés había cortado camino y vuelto por donde quiso a la pista y tomaron nota del incidente. En la segunda curva, Lance Stroll casi choca a Franco Colapinto y éste frenó con brusquedad e hizo un trompo que lo retrasó.
Pero no quedó todo ahí, porque Liam Lawson debió entrar enseguida a boxes a cambiar el alerón delantero. Volvió a la pista y luego abandonó. Justo quien corre riesgo de no tener butaca en 2026.
Enseguida Verstappen y Hamilton quedaron palo y palo, y la ligó el británico yéndose al pasto. Pero no la sacó tan cara. Russell seguía por la radio a pleno protestando por no sancionar a Mad Max y estaba detrás de Kimi Antonelli. Peor la pasaba Piastri, octavo en la 13° vuelta. Mientras el joven Bearman estaba en un cumple: cuarto después del tole-tole de las primeras vueltas. A río revuelto, había ganado mucho terreno, incluso pasando a Verstappen.
En la 16° vuelta, llegó la primera penalidad: Hamilton se ligó 10 segundos de sanción por haber ganado terreno sin devolver la posición. Cuando le avisaron al heptacampeón, sonó el pitido habitual para tapar los insultos por la radio. Total normalidad. Y justo cuando entró a boxes a cambiar neumáticos y cumplir la sanción, los comisarios decidieron en esa 24° vuelta que no habría castigo por el duelo con Max en la primera curva.
La adrenalina regresó al circuito con el comienzo del cambio de gomas y Sainz se excedió en la velocidad en la calle de boxes y recibió 5 segundos de sanción. Hulkenberg fue el segundo abandono, Bearman seguía firme bien adelante y los tres primeros aún tenían que pasar por boxes. Los Alpine, bien en el fondo aun sin cambiar neumáticos, daban lástima. Alonso se convertía en el tercer abandono justo en la mitad de la carrera. Y cuando Verstappen entró a boxes, Bearman -¡sí, Bearman!- quedó tercero.
Norris seguía con su paseo en la punta, seguido por Leclerc, y como Piastri no podía pasar a los Mercedes, el británico estaba al frente del campeonato de pilotos por apenas 3 puntos. Pero de pronto sucedió lo inesperado: comenzó la estrategia de ir a dos paradas y los primeros en ejecutarla fueron Russell, Bearman y Piastri. Casi al mismo tiempo, a Colapinto recién lo mandaban a boxes a cambiar los neumáticos duros de la largada por los blandos.
Para Piastri llegó un poco de aire cuando en la 60° vuelta al fin pudo superar a Russell y perdía la punta del campeonato por apenas una unidad. «Durante toda la carrera estuve detrás de alguien y luchando con el aire sucio, así que fue bastante difícil. Obviamente, cuando tu compañero de equipo gana la carrera, terminar quinto no es tan extravagante», se resignó el australiano.
Mientras tanto, Verstappen se acercaba cada vez más a Leclerc por el segundo lugar. En cada giro la arremetida era demencial, así como Colapinto se acercaba a Gasly.
Pero cuando estaba todo dado para que Mad Max fuera segundo, llegó el auto de seguridad virtual y el final fue apenas un desfile ante los fanáticos. «Fue un fin de semana difícil para nosotros, pero estar luchando por el segundo puesto con todo lo que ha pasado en las primeras vueltas es un resultado muy bueno«, dijo Verstappen.
Norris lidera con 357 puntos, seguido por Piastri con 356 y Verstappen con 321. Quedan cuatro Grandes Premios: el 9 de noviembre, el de San Pablo; el 22 de noviembre, el de Las Vegas; el 30 de noviembre, el de Qatar; y el 7 de diciembre, el de Abu Dhabi.

